«Escribir es pensar. Escribir bien es pensar claramente, por eso es tan difícil.»
– David McCullough/historiador | escritor.
En el sistema de comunicación existente entre un proveedor de servicios o productos y sus clientes es clave contar con contenidos de valor que interesen a las audiencias. Nos referimos a esos contenidos que usted ve en redes sociales o en navegando en la red y le hacen detenerse, entrar a un enlace y leer, saber más al respecto.
Todas las empresas, en especial las de tecnología, saben que se requiere de contenidos que acompañen al prospecto cliente durante el ciclo de compra, desde antes de que se dé un “lead”, luego, cuando entra la relación en el proceso de construir confianza y por supuesto, que en la etapa de post venta.
A los usuarios individuales nos beneficia conocerlo porque funciona de la misma manera al construir con palabras la arquitectura de experiencia de usuarios de nuestra imagen de marca personal.
Gran parte de esta fase “enamoramiento” se sostiene gracias a la “arquitectura de las palabras”, que es justamente, construir a través de las palabras un proceso fuerte aún cuando el prospecto cliente no vea a otro humano, leyendo siente que está en comunicación con alguien en quien puede confiar, quien le explica y se interesa porque tenga, de la manera más sencilla y entendible, la información que requiere antes de realizar una inversión o antes de adquirir soluciones tecnológicas.
Contenido creado por expertos
Toda persona relacionada al marketing digital sabe que el contenido es fundamental, pero antes de asignar a un individuo la delicada tarea de escribir, de representar a la empresa a través de las palabras y mensajes que envía, es necesario que revisen las competencias que debe tener quien escribe.
Al trazar la estrategia alineada a los objetivos de negocio y en pro de la transformación digital existen perfiles que deberían estar presentes: el storyteller o narrador de historias, el redactor de textos o copywriter y el del redactor de texto de experiencia de usuario o UX Writer.
Estos perfiles son diferentes, y si bien es cierto, es posible que una persona pueda desarrollar o tenga las competencias para cada perfil, su intervención en el proceso de creación de contenidos se da por separado, en momentos distintos.
El Storyteller es el que narra historias para generar empatía, cercanía con la empresa y busca con sus textos enganchar emocionalmente al lector. Por su parte, el copywriter escribe para provocar la acción compra, para generar el deseo y vender, monetizar con mensajes claros que hagan mover la cuenta de resultados. El UX Writer es un perfil muy orientado a la lingüística y es capaz de decir, sugerir e indicar con microtextos, pocas palabras y frases, de forma clara, lo que debe hacer el usuario en todo su proceso de interacción con una aplicación, con un sitio web, etc.
Los tres perfiles deben dominar el lenguaje escrito, la capacidad de comunicarse a través de palabras y plasmar ideas de forma comprensible. ¿Quién está a cargo del contenido de su sitio web? Dejar la redacción de sus textos en manos de un novato o de una persona que no cuide la ortografía, y que carezca de conocimientos de semántica, morfología, sintaxis, fonética (chatbots, robots y asistentes virtuales), pragmática y lexicología es arriesgado, su marca se expone y no rentabiliza su inversión.
Enseñar a las máquinas a comunicarse con los humanos y a interpretar el lenguaje natural humano es trabajo de equipos de «conversation design» en las empresas líderes del mercado, nunca había sido tan necesario hablar bien, comunicarse bien y comprender todo lo que involucra el lenguaje en el marco socio cultural.
De igual manera, estos perfiles requieren desarrollar habilidades para la comprensión socio cultural y del entorno, la observación y el análisis conductual de sus públicos objetivos es fundamental.
Con la presencia, cada vez más común, de asistentes virtuales, agentes artificiales y artefactos conectados la comunicación correcta se hace necesaria. Existe un enfoque muy fuerte hacia la creación y diseño de lenguaje conversacional por los líderes tecnológicos.
Se han dedicado cientos de horas a comprender como interactúan y se comunican los humanos para trasladar este conocimiento a la realidad que vivimos al usar la red, aplicaciones y plataformas digitales, ya pasó el tiempo en que se le permitía a un novato experimentar con los contenidos y mensajes, se requieren expertos creadores con formación en estos quehaceres.
Google busca contenido de valor y ha dispuesto que sus algoritmos y «spiders» sean capaces de identificarlos, este tipo de contenido es premiado, en cambio, lo opuesto es penalizado, y todos sabemos que estar en el ojo del buscador es fundamental.
Las tendencias de comunicaciones tecnología-humanos se enfocan la correcta escritura, que va más allá del aprendizaje académico básico, se buscan perfiles especializados para hacer frente al reto enorme que supone comunicar y sobresalir en un mar de contenidos en la red.