Una historia del New York Times de julio de 2018 sobre el estado del arte en manos de robots, titulado ¿Cómo las manos de robot han evolucionado para hacer lo que podemos hacer los humanos?, investigación realizada por Mae Ryan, Cade Metz y Rumsey Taylor llama poderosamente la atención.
Lograr que un periódico de esa relevancia le dedique varias páginas a un tema de Inteligencia Artificial se hace cada vez más común y no por eso, menos importante. Siendo o no conscientes de ello, estamos inmersos en una sociedad con una gran fascinación por la robótica, fascinación que es acompañada de un gran desconocimiento y muchas expectativas que se fundamentan en las taquilleras películas de Hollywood.
El artículo y los vídeos publicados en el diario forman parte de 3 de 6 proyectos que describen la investigación en curso en la UC Berkeley AUTOLab, que incluye a Dex-Net, un nuevo enfoque de aprendizaje profundo de Universal Picking para almacenes y hogares. ¿Quiénes están detrás de estas investigaciones? ¿Por qué son tan importantes sus consideraciones?
¿Qué han logrado los investigadores para que publiquen sus hallazgos?
Según la publicación: «Lo que realmente quiere es un robot que pueda recoger cualquier cosa, incluso cosas que nunca antes haya visto. Eso es lo que los investigadores de AUTOLab han construido en los últimos años … El sistema se beneficia de avances espectaculares en el aprendizaje automático. Los investigadores de Berkeley modelaron la física de más de 10,000 objetos, identificando la mejor manera de recoger cada uno. Luego, utilizando un algoritmo llamado red neuronal, el sistema analizó todos estos datos, aprendiendo a reconocer la mejor manera de recoger cualquier elemento. En el pasado, los investigadores tenían que programar un robot para realizar cada tarea. Ahora puede aprender estas tareas por sí solo».
Estado del arte, la frase
Encontramos la frase en múltiples “papers científicos”, por lo que explicarla viene bien antes de proseguir con los detalles del tema principal de este artículo.
El estado del arte es la cúspide más alta del conocimiento científico, representa todo el desarrollo profesional del investigador doctoral. Al llegar al “estado del arte” se considera que el investigador ha llegado a un nivel de instrucción tal que le impulsa a crear conocimiento y no a estudiarlo. Proviene originalmente del campo de la investigación técnica, científica e industrial haciendo alusión clara a la situación de una determinada tecnología, es lo más innovador o reciente con respecto a un arte específico. En los estudios de investigación académica se refiere al “estado o situación de un tema en la actualidad”.
Estrecharle la mano al futuro
La realidad que vivimos nos muestra un mundo que está envuelto en una carrera por lograr que los robots e Inteligencia Artificial logren emular lo más cercano al humano, imitar lo que hacemos sin siquiera pensarlo.
Uno de los actos más simples, a los que poca atención le mostramos, es la capacidad natural que tienen nuestras manos de sostener, agarrar objetos con la suavidad o rigidez que la textura y forma del objeto requiera. Lo hacemos en fracciones de segundos y pocas veces sin una reflexión o análisis profundo previa a llevarlo a cabo. ¡Simplemente lo hacemos!
¿Sabía usted que para qué un robot pueda mover dedos se requieren miles de horas de trabajo e investigación?
El vídeo muestra como una mano robótica agarra una regla. El toque y los movimientos buscan imitar la suavidad y delicadeza del toque de una mano humana. Expertos en esta área de investigación comentan: «Cuando tomas algo como un bolígrafo de una mesa, lo primero que tocas es la mesa», dice Oliver Brock, un robotista de la Universidad Técnica de Berlín. No pensamos en dónde tenemos que colocar nuestros dedos. La suavidad de las manos humanas permite algo que se llama contacto compatible: los dedos se amoldan contra la superficie del objeto. «Debido a que tienes mucho contacto con la superficie, puedes acercarte mucho más intuitivamente», dice Daniela Rus, experta en robótica del Instituto de Tecnología de Massachusetts en Cambridge. «Con dedos suaves, cambiamos el paradigma de agarrar».
Para llevar a la realidad proyectos de utilidad en la industria se requiere la multidisciplinariedad, solo a través de esta visión multidisciplinaria es posible investigar ciencia básica y aplicada para el diseño de sistemas y el rendimiento robusto, abordando la incertidumbre inherente en la detección, el modelado y la actuación utilizados para el control, el aprendizaje y la identificación de sistemas.
En busca de lograr esa visión y llevarla a la práctica se creó el Centro para la Investigación de Tecnología de la Información en el Interés de la Sociedad (CITRIS) que lidera una iniciativa y programa de PERSONAS Y ROBOTS, cuyos temas principales de investigación son Cloud Robotics, Deep Learning, Human-Centric Automation y Bio-Inspired Robotics, investigación multidisciplinaria que apoya los esfuerzos de profesores y estudiantes que trabajan en robótica de los cuatro campus de CITRIS: UC Berkeley, UC Davis, UC Merced y UC Santa Cruz.
La iniciativa no es algo de fundamento reciente, por el contrario, se basa en 40 años de investigación en robótica, una red de ex alumnos y muchos laboratorios y proyectos activos, la Iniciativa aprovechará innovaciones en sensores, dispositivos, UAV, redes, optimización y aprendizaje automático para mejorar la experiencia humana en salud, fabricación, transporte, seguridad y una amplia gama de otras aplicaciones que pueden beneficiar a la sociedad. Establecida con la visión de transformarse en un catalizador de nuevas investigaciones con software, conjuntos de datos, seminarios y colaboraciones con la industria, laboratorios y divulgación pública.
«La robótica y la automatización están avanzando rápidamente debido a las innovaciones en sensores, dispositivos, UAV, redes, optimización y aprendizaje automático, acelerados por la inversión corporativa y privada. Estos sistemas tienen un enorme potencial para reducir la pesadez y mejorar la experiencia humana en el cuidado de la salud, la fabricación, el transporte, la seguridad y una amplia gama de otras aplicaciones en interés de la sociedad. Lograr esto requerirá sensibilidad a los problemas humanos, una rigurosa teoría evaluada en los puntos de referencia estándar y sistemas modulares basados en herramientas de software compartidas.»
CITRIS y el Instituto Banatao (Dado Banatao es un exitoso capitalista de riesgo y visionario de la tecnología de Silicon Valley que fue pionero en el conjunto de chips de computadora personal (PC) y la arquitectura de aceleración de gráficos, dos tecnologías básicas que aún se encuentran en cada PC. Dado es miembro del Consejo Asesor de CITRIS y del Consejo Asesor de Ingeniería de Berkeley. Su esposa, María, es miembro de la Fundación de la Universidad de Berkeley.), representan una visión audaz y emocionante que involucra a uno de los mejores sistemas universitarios del mundo para generar beneficios sociales y económicos. Juntos, sus creadores han estado pensando en la tecnología de maneras que crucen las fronteras tradicionales. Estos sistemas tienen un enorme potencial para reducir la pesadez y mejorar la experiencia humana en el cuidado de la salud, la fabricación, el transporte, la seguridad y una amplia gama de otras aplicaciones en interés de la sociedad. Lograr esto requerirá sensibilidad a los problemas humanos, una rigurosa teoría evaluada en los puntos de referencia estándar y sistemas modulares basados en herramientas de software compartidas.
Según indica la página de CITRIS: «Las personas y los robots no son mutuamente excluyentes. Las predicciones de la «Singularidad» son una distracción de un concepto más importante que podría caracterizarse como «Multiplicidad», una categoría emergente de sistemas donde diversos grupos de seres humanos trabajan en conjunto con diversos grupos de máquinas para resolver problemas difíciles. La multiplicidad combina los resultados emergentes en inteligencia colectiva y computación en la nube, basándose en la investigación en aprendizaje conjunto, big data y software de código abierto. La investigación en psicología, derecho, ética, arte y humanidades es esencial para proporcionar un contexto histórico y cultural y desarrollar métodos apropiados para el diseño de sistemas y políticas que aborden problemas humanos como la inclusión, la privacidad y la ética que debe regir al diseñar Inteligencia artificial.»
Comité Ejecutivo de primera línea
Los miembros del comité ejecutivo de esta organización provienen de
UC Berkeley:
Pieter Abbeel, experto en Robótica de aprendizaje, percepción y control
Anca Dragan, Interacción Robot-Humano, Aprendizaje robótico:
Ken Goldberg, Medical Robotics, Aprendizaje robótico, Automatización algorítmica. Claire Tomlin, Control, Percepción, Sistemas Human Machine.
De la UC Davis:
Stavros G. Vougioukas, Robots agrícolas.
De la UC Merced:
Stefano Carpin, Planificación de robots, toma de decisiones secuenciales, manipulación.
De la UC Santa Cruz:
Gabriel Hugh Elkaim, Control y Sistemas Embebidos.
Ricardo Sanfelice, Sistemas híbridos y ciberfísicos, robótica y control.
Para estar al día con las innovaciones que en materia de Inteligencia Artificial nos presenta el panorama mundial es necesario implementar el modelo de la triple hélice (academia, gobierno y empresa privada trabajando con el mismo fin tecnológico, avanzar y hacerlo al tiempo adecuado) funciona acompasada en los países que lideran en investigación y aplicación práctica de las tecnologías a la vida diaria.
Referencias Consultadas:
https://www.nytimes.com/interactive/2018/07/30/technology/robot-hands.html?smid=tw-share