Espontaneidad, creatividad e imaginar: tres habilidades vedadas a los robots

Hacer algo espontáneo, entretenido e inesperado es tan natural, que no le prestamos la atención, debida, enumeramos tres acciones, que proceden de cualidades humanas, que los robots aún no logran emular. Y es que, para lograrlo, deberían tener inteligencia general natural, la inteligencia qué, aún con nuestra imperfección, nos permite relacionar conocimientos, inventar, imaginar y usar, en el momento, apropiado lo que hemos aprendido y que está almacenado en algún sitio de nuestro cerebro.

Así de fantásticos somos, máquinas con una programación y recursos que no utilizamos en su totalidad, pero lo olvidamos y le atribuimos características de semidioses a los algoritmos y robots.

La inteligencia artificial ha logrado perfeccionar comportamientos siguiendo patrones, esos patrones son o fueron creados por cerebros humanos capaces de imaginar que una máquina, a través de algoritmos, sea capaz de entregar mejores resultados, más precisos que los que podemos entregar nosotros.

Esa capacidad para imaginar y proyectar una idea en el futuro, dar los pasos que se requieren, colocar cada pieza en su lugar para que pase, esa es una de las habilidades que están vedadas a los robots actualmente.

Afrontar problemas desde diversos ángulos

Si el algoritmo está programado o diseñado con unos límites precisos, es improbable que se salga de ellos, es casi imposible que sea capaz de buscar nuevas alternativas o perspectivas desde las cuales afrontar el problema.

Es más, no puede, tal como usted si lo haría, despertar a media noche con una idea que se relaciona con el problema, anotarla, volver a dormir y retomarla al día siguiente, es uno de esos comportamientos que solo un humano manifiesta. 

En tiempos de tecnología, disrupción y cambios, aunque lo quisieran sus creadores, los robots no son capaces de anticipar nuevas tendencias, comprender empáticamente las necesidades de los usuarios, actuales o futuras para proponer alguna acción que de forma inesperada solucione un problema que ni siquiera la audiencia sabe que tiene.

Imaginar, imaginar, imaginar

Otro tema común para nosotros. En cuantas ocasiones nos han dicho: imagínate que … y nuestra mente coloca esos elementos faltantes, y el interlocutor no duda que hemos podido recrear “sin elementos físicos” esa idea que el nos comunicó con palabras.

Los algoritmos no están diseñados para imaginar, para crear escenarios hipotéticos que ellos mismos puedan comprender y vivenciar .

Al ser tan espontáneos, los humanos, llevamos a cabo acciones inesperadas, inclusive para nosotros mismos, en lenguaje coloquial “nos salimos del guión” e improvisamos, haciendo uso de la experiencia y los conocimientos adquiridos previamente.

Hemos mencionado solo tres de las habilidades humanas que los robots no son capaces de emular y que nos permiten comprender porque es necesario trabajar en colaboración humano-máquina para obtener mejores resultados.

¿Qué otra cualidad o competencia mencionaría?

Creatividad y aprendizaje autónomo ¿excluyentes?

“Lo que hay que hacer es poner a máquinas y humanos juntos, a trabajar colaborativamente, porque es la fórmula más eficaz”.

― Ramón López de Mántaras

Creatividad, aprendizaje automático y la capacidad de predecir comportamientos (centrada en patrones de millones de datos de usuarios) es la pócima que los alquimistas del marketing digital están tratando de perfeccionar de la mano de los expertos en inteligencia artificial.

Son las llamadas soluciones cuyo fundamento principal es el concepto de Data Driven Creative, que busca mejorar sustancialmente la industria de las comunicaciones, aspirando a crear mensajes personalizados para cada uno de los clientes potenciales que las marcas decidan abordar.

Un mensaje personalizado, exclusivo para usted

Los asistentes virtuales, el buscador más popular y otras aplicaciones de moda utilizan el nombre de pila del usuario para enviarnos mensajes que dan la impresión que son exclusivos para nosotros, hasta aquí nada novedoso. La gran diferencia radica en que los mensajes estarán preparados de acuerdo a sus gustos y preferencias, tipo de comunicación preferida y en un lenguaje con el que usted se sienta identificado. Tal cual, si un amigo o un allegado, que le conoce bien fuese el emisor.

Imagínelo, le llaman por su nombre, responden sus consultas hasta satisfacer sus inquietudes y le hace sugerencias enfocadas en gustos, presupuestos y estilo de vida.  La tentación, la seducción del producto de esta forma será tan sencilla que prácticamente estaremos vencidos antes de siquiera analizar la viabilidad de la compra.  

Optimización de los mensajes

Haciendo uso de tecnología predictiva será posible crear modelos de personalización publicitaria tan precisos que asustan, porque se basan en nuestra conducta y se mejorarán cada vez más, porque el algoritmo es capaz de aprender de forma automática como complacernos y seducirnos hasta que decidamos realizar la compra.

Los modelos predictivos, la automatización, la escalada de producción de contenidos generarán nuevos perfiles creativos en ambos espectros; la creatividad artística y la creatividad científica.

Aunque no están muy popularizados en nuestras latitudes, en otros mercados son objeto de investigación y desarrollo, siendo el campo de la publicidad y marketing inteligente un campo fértil donde se está invirtiendo muchísimo dinero para lograr, finalmente, conquistar la mente del consumidor.  

¿Máquinas creativas?

Se escribe mucho sobre la capacidad de crear que tendrán las máquinas, crear en el sentido estricto de producir un resultado para el que un humano, requiere, obligatoriamente, ser altamente creativo. Por ejemplo, en la producción musical y artística.

Pierre Barreau es un músico que también es experto en aprendizaje automático y tiene un emprendimiento llamado AIVA.

Durante sus presentaciones en foros de Inteligencia Artificial el joven músico reta al público diciendo:  «Escuchen estas dos melodías y adivinen cuál fue creada por un algoritmo y cuál por un humano.»

Aiva, es el primer compositor virtual basado en machine learning mundialmente aceptado.

Los sorprendentes resultados del emprendimiento de Pierre están abriendo una ventana que hasta hace poco se creía exclusiva para los humanos, la creación de pistas musicales, jingles comerciales y tono efecto de sonido posible para los e-games e industria del videojuego.

Destaca sobre manera que el algoritmo es capaz de crear, dependiendo del requerimiento, y de su complejidad, luego de tener los datos requeridos para establecer patrones y aprender, en poco tiempo la música que a un humano le toma días.  Y evidentemente, esta situación, abarata costos y hace que los músicos se preocupen por ser “fácilmente desplazados” por una máquina.

Parece que la creatividad y el aprendizaje automático dejan de ser excluyentes para trabajar colaborativamente. Corresponde a los humanos, acercarse al conocimiento y la comprensión para utilizar a su favor la inteligencia artificial, que ya está aquí.

Imagen: Pixabay

Referencias consultadas:

https://estoesiot.es/the-hook/

https://www.infobae.com/tecno/2018/03/23/el-cerebro-humano-detras-de-aiva-el-primer-robot-en-ser-reconocido-oficialmente-como-compositor/

Escrito por Msc. Irasema Rivas-González

Creatividad Computacional ¿la Inteligencia Artificial puede ser creativa?

“La creatividad es el poder de conectar lo aparentemente inconexo.” William  Plomer

Robots que hacen arte, algoritmos que escriben, humanoides danzantes. Los titulares de las noticias cada vez son más llamativos, nos alertan sobre la existencia de máquinas capaces de pintar obras maestras simulando el estilo de un artista reconocido, aptas para componer o terminar sinfonías inconclusas de los grandes maestros, con sistemas desarrollados para reconocer el estilo de escritura de un autor y simularlo, otros pueden pintar cuadros, tal cual lo harían los grandes genios. ¿Qué está aconteciendo allá afuera? ¿Dejó de ser la creatividad un talento exclusivamente humano? ¿Qué es la Creatividad Computacional y por qué debe interesarnos? Antes de responder repasemos los inicios

Creatividad Humana

Según Ramón López de Mántaras “La creatividad parece algo misterioso porque cuando tenemos ideas creativas es muy difícil explicar cómo las hemos tenido y a menudo recurrimos a conceptos imprecisos como «inspiración» e «intuición». El hecho de que no seamos conscientes de cómo se manifiesta una idea creativa no implica necesariamente que no exista una explicación científica. Lo cierto es que no somos conscientes de cómo desempeñamos otras actividades como comprensión del lenguaje, reconocimiento de patrones, etcétera, y sin embargo tenemos técnicas cada vez mejores de inteligencia artificial para replicarlas.”

De la mano de la Psicología y de la Pedagogía, se comienza a utilizar el término creatividad en los albores del siglo XX, cuando se desea conocer cómo es el proceso de producción de ideas y solución de problemas, saber cómo a los humanos se nos ocurre crear algo. Y aunque no existe una definición aceptada por todos, lo que se acepta es que la innovación y lo novedoso está presente en el resultado.

Los humanos somos capaces de establecer conexiones nuevas entre ideas ya existentes, fundamentándonos en el pensamiento creativo. Este pensamiento a su vez, según indica el autor Edward Bono (1998) se presenta en dos opciones. El pensamiento lineal que, a través de la metodología tradicional, del proceso lógico, nos permite razonar las cosas, comprenderlas para solucionarlas. Y el pensamiento lateral que desorganiza la secuencia lógica y la metodología tradicional del pensamiento permitiendo que desde otros ángulos se llegue a encontrar una solución.

Dentro de la dinámica del proceso creativo ambos tipos de pensamientos son necesarios, con el pensamiento lateral creamos ideas (diríamos que es el que no tiene limitantes, está abierto a probar e intentar) y con el pensamiento lineal (es el que da orden y estructura) le damos forma, seleccionando, desarrollando, procesando y organizando la secuencia de esas ideas.

Creatividad Computacional

Creatividad computacional es un esfuerzo multidisciplinario que está localizado en la intersección de los campos de inteligencia artificial, psicología cognitiva, filosofía, y las artes.

En el artículo titulado “La inteligencia y las artes. Hacia una creatividad computacional”, encontramos esta definición: «La creatividad computacional es el estudio del desarrollo de software que presenta un comportamiento que sería considerado creativo en seres humanos.” Este software creativo puede usarse en tareas anónimas, como inventar teorías matemáticas, escribir poesía, pintar cuadros y componer música. Sin embargo, la creatividad computacional también permite comprender cómo funciona la creatividad humana y reproducir programas para su uso por parte de creadores donde el software actúa como colaborador creativo y no como mera herramienta. Históricamente ha sido difícil para las sociedades reconciliarse con las máquinas que pretenden ser inteligentes, y aún más admitir que puedan ser creativas. Incluso en el ámbito de la informática sigue habiendo escepticismo respecto al potencial creador del software. Una afirmación típica de los detractores de la creatividad computacional es que «simular técnicas artísticas equivale a simular el pensamiento y el razonamiento humanos, en especial el pensamiento creativo. Es imposible hacer esto usando algoritmos o sistemas de procesamiento de información»

«Se trata de participar en la creación de artefactos computacionales con el objetivo de desarrollarse como pensadores del futuro» Clic para tuitear
Aplicaciones de la Creatividad Computacional

En la creación artística, en las esferas del arte tales como la plástica, la música, la literatura. Mediante el estudio y la simulación del comportamiento creativo natural de los humanos y a través de programas desarrollados para que agentes artificiales se dan los resultados que nos admiran cuando vemos a las máquinas recreando la creatividad humana. 

Siempre habría que preguntarse si ese proceso de creación es autónomo o aprendido de un humano. Hecho por programas de aprendizaje automático o programas que requieren de la participación humana. Aunque si nos vamos al origen real tal cual dijo Jack Ma durante el Foro Económico Mundial “Los hombres fuimos quienes inventamos los ordenadores, pero aún no he visto a un ordenador inventar a un ser humano.”

En diversos laboratorios del mundo se entiende la recreación de la creatividad humana mediante herramientas de generación, para ser utilizadas como herramientas de apoyo a la creatividad humana en sus diversas manifestaciones: creatividad plástica, creatividad fluente, creatividad filosófica, creatividad social y creatividad inventiva.  Utilizan Inteligencia Artificial para llevar a cabo experimentos y desarrollos de generación artística sobre todo en la generación musical con sistemas multiagentes, algoritmos bioinspirados, organizaciones virtuales, realidad aumentada, simulación de entornos, modelado y animación, entornos binaurales.

La Creatividad Computacional procura modelar, simular la creatividad utilizando un ordenador logrando: Entender más claramente como se da el proceso de creatividad humana y a raíz de ello, formular una perspectiva algorítmica del comportamiento creativo humano. Construir un programa u ordenador capaz de alcanzar el nivel de creatividad humano. Diseñar programas que potencien la creatividad humana, sin ser necesariamente creativos.

Es un área que sigue desarrollándose, buscando aprovechar los conceptos, prácticas y enfoques de diferentes disciplinas y contextos para ofrecer soluciones creativas emulando lo que hacemos de forma natural los humanos.

Bibliografía Consultada:
https://es.wikipedia.org/wiki/Creatividad_computacional
https://www.accioncultural.es/media/2018/ebook/Anuario/7PabloGervas.pdf
https://bisite.usal.es/es/investigacion/lineas-investigacion/creatividad-computacional

Imágenes: Pixabay

Escrito por: Msc. Irasema Rivas-González

¿Qué es el arte digital y por qué debe interesarle?

“Cuando comencé a trabajar con la computadora, tuve que analizar detenidamente cómo podría usarse en un contexto artístico. “- Charles A. Csuri

El dinero fluye en la industria del videojuego. Los e-Sport reportan ganancias y crecimientos acelerados en el mundo entero. Dan vida a un ecosistema de creación, producción y comercialización que llama la atención de los gobiernos y las empresas. Ecosistema que no es nada despreciable para los emprendedores e inversionistas que miran con detenimiento para aprovechar las oportunidades existentes.

Municipalidades y ciudades se disputan por ser la sede de las convenciones y eventos que aglutinan a los “gamers” y desarrolladores. Pocos recuerdan que detrás del desarrollo tecnológico de este producto comercial existen artistas digitales, que saben cómo crear universos virtuales, capaces de mantenerlo fuera de la realidad durante largos periodos de tiempo.

La Fotografía Digital, Arte tridimensional (3D), Pixel Art, Arte Generativo, Arte con aerógrafo digital, Escultura y Modelado digital y otras manifestaciones, que cada vez son más populares, dan vida a lo que se conoce como arte digital.

¿Qué nos propone el arte digital?

Un acercamiento a la relación entre lo inmaterial de las plataformas digitales y la materialidad del arte es posible y esto lo demuestran artistas de todo el mundo que incursionan, y algunos trabajan exclusivamente con herramientas tecnológicas de última generación.

Con la presencia del arte digital es posible crear mundos alternativos rompiendo con la representación material clásica de todo lo que nos rodea.

Drones, cámaras, equipos especializados, plataformas, programas, creatividad, innovación y artistas se juntan para producir piezas que calan en el gusto y preferencia de las generaciones actuales.

El arte digital no es tan reciente

Su historia se remonta incluso antes de la primera exposición de arte digital tuvo lugar en 1953 en el Sanford Museum.

Entre sus referentes se encuentra el alemán George Nees, de los primeros investigadores, teóricos y artistas digitales reconocidos. Su primera exposición (De gráficos realizados con un ordenador) se registró en 1965. Al estudiar y crear dejó un legado interesante, realiza una tesis doctoral bajo la supervisión de Max Bense (cuyo trabajo en “Information Aesthetics” establece la conexión entre él y las artes digitales), tesis presentada en 1969 con un tema sobre los “Gráficos generados por computadora”, sus primeros dibujos se basaban en algoritmos y fueron creados mediante un plotter.

Otro gran exponente es Charles A., Csuri, llamado el artista entre los científicos, fue siempre un artista en pensamiento y práctica. En su investigación y proceso creativo descubrió que sus círculos incluían en su mayoría a científicos, quienes estaban interesados ​​en lo que un artista tenía que decir sobre la representación del mundo fenomenal.  Fue el primer artista en recibir fondos del National Science Foundations (NSF). NSF, organismo que quedó tan impresionado con su trabajo, que apoyaron su investigación creativa durante veinte años.

Existen artistas de renombre que han dejado y siguen dejando huellas en el arte digital actualmente.

  • En 1969 Vera Molnar realizó sus primeros gráficos utilizando una computadora, desde ese entonces gran parte de sus obras son arte digital.
  • La exponente del collage, técnica de las más utilizadas en el Arte Digital Margaret Eicher no puede faltar en este recuento.
  • Laurence Gartel fue de los que utilizó su ordenador para darle forma a nuevas obras artísticas, retocando digitalmente sus propias fotografías.
  • Yves Netzhammer reconocido exponente del arte digital en la creación de animaciones (3D Art) en tres dimensiones.
  • La realidad virtual y expresión artística fue estudiada a mediados de la década de 1970, cuando Myron Krueger creó un entorno físico interactivo llamado «Videoplace». En lugar de pantallas montadas en la cabeza, «Videoplace» usó proyectores y cámaras de video para interacción, a través de las siluetas en pantalla de los usuarios. «Videoplace» demostró el potencial de los entornos virtuales para la expresión artística y creativa.

“Intento jugar al límite de la razón y lo absurdo. Es una invitación a algo vivo. «

– Charles A. Csuri
Arte Digital para conectar continentes

La red internacional ARTBOX DIGITAL promueve el intercambio entre América Latina y África, tratando de responder a interrogantes sobre el uso de las nuevas tecnologías y herramientas de comunicación para replantear nuestra relación interpersonal y con los ecosistemas.  Buscando crear convergencia para apoyar a artistas y difundir sus obras. 

Del 21 de mayo al 4 de junio de 2019, es posible apreciar en la Alianza Francesa de Panamá, sin costo, el encuentro digital de artistas africanos a través de sus obras digitales en la exhibición ARTBOX . En tres semanas los responsables visitarán El Salvador, y es una gran oportunidad para que hagamos un acercamiento a este tipo de manifestaciones creativas en la región.

El proceso creativo del diseño y arte digital, requiere gran capacidad creativa e imaginación, pero de igual manera, es necesario desarrollar competencias, conocimientos y destrezas para el uso y aprovechamiento de los recursos digitales.

“Con demasiada frecuencia las personas ponen la ciencia y las humanidades, o la ciencia y las artes, en diferentes silos. Son la expresión más alta de la curiosidad y la creatividad de la humanidad” Fabiola Gianotti, directora… Clic para tuitear
El arte tiene lugar fuera de la máquina. – Charles A. Csuri Clic para tuitear

Las obras de arte digital son una completa aplicación de tecnología y creatividad a esas manifestaciones que se piensan propiedad exclusiva del mundo real.

Lo virtual y lo físico convergen en la red en forma de arte y nos hablan de las relaciones entre nuestras ideas, el espacio intangible que llamamos Internet y esos paradigmas de creación artística que sigue rompiendo la tecnología.

Fuentes Bibliográficas:

https://csuriproject.osu.edu/

https://csuriproject.osu.edu/index.php/About/arthistory

Imágenes: Pixabay

Patentes, derecho de autor y marcas en un mundo digitalizado

“Los derechos de propiedad deben tener límites objetivos y discernibles.”

En un mundo donde los contenidos digitales son en gran parte de acceso autorizado, libre, gratuito y universal, los que reclaman el derecho de propiedad intelectual se enfrentan a múltiples desafíos.

La propiedad intelectual se relaciona con las creaciones de la mente: invenciones, obras literarias y artísticas, así como símbolos, nombres e imágenes utilizados en el comercio, por ende, tienen un impacto en la interacción social.  Todo lo que se crea bajo patentes de invenciones, los diseños industriales, las marcas e indicaciones geográficas se ubica dentro de la propiedad industrial. Por otro lado, las obras literarias, los diseños arquitectónicos, la música, las obras artísticas usualmente se protegen bajo el llamado derecho de autor. Estos derechos conexos al derecho de autor son competencia de los artistas intérpretes y ejecutantes sobre sus interpretaciones o ejecuciones, los de los productores producciones y contenidos.

Establecido este marco conceptual traemos a colación la red y su propuesta de favorecer el acceso multitudinario a la libre a la información, cultura de forma inmediata y sin fronteras. Situación que afecta directamente el concepto que con respecto a la propiedad intelectual se ha promovido.

Los creadores de contenidos se ven en la disyuntiva de proteger o no, su derecho de autor y de aprovechar o no, la red para internacionalizar, para dar a conocer y potenciar aquello que producen, exponiendo sus creaciones a ciertas conductas, que sin ser las correctas, abundan en la red. Nos referimos al uso sin mención del creador de la obra, a la modificación y uso para fines comerciales de creaciones, entre otros. Es una situación que se magnifica por la inmediatez y presencia mundial de todo lo que se coloque en ese espacio virtual.

Cada vez es más difícil, por no decir imposible, hacer respetar el derecho de autor, el cual no es garantía de que se pueda validar en un medio tan complejo como es la red. Si observamos esta situación desde la visión que fomenta la difusión y promoción democrática del conocimiento, se pudiese mirar al derecho de autor como un freno para lograr el fin último del conocimiento, que es llegar a todos por igual, sin limitantes.  Al verlo desde la lógica del beneficio que debe resultar del trabajo realizado por sus creadores, la red no ofrece las normativas ni mecanismos de control suficiente para hacer valer esos derechos.

Por todos, es conocido que existen los derechos bajo licencia “Creative Commons”, que fomentan el uso, modificación y divulgación sin que el autor obtenga reconocimiento por el valor del contenido compartido. Tipología que promueve el libre acceso y difusión de las obras.  Pero, sigue existiendo el derecho natural del creador a recibir algún beneficio de aquello que ha creado, derecho que involucra emolumentos con los que los creadores pueden seguir en el proceso de creación y mantenerse así mismos y a sus familias.

El caso de las aplicaciones, plataformas y servicios de red, así como los sitios que ofrecen a precios irrisorios las licencias de uso o descarga de estos productos tienen a la postrimería la misma disyuntiva. Existen en esta Era de la Creatividad y el Conocimiento, en el ámbito de la sociedad de la información, nuevas alternativas para la creación y difusión de información de bajo costo y fácil acceso, tanto como personas esperando que surja un nuevo producto para copiarlo y acceder a beneficios de su comercialización sin siquiera considerar al creador de la idea original.

La propiedad intelectual enfrenta nuevos retos y su paradigma esencial de propiedad ha de ser evaluado para que sea efectivo en un mundo que cada vez, se orienta a la apertura y el uso masivo de toda información y contenido que se distribuya o divulgue en el espacio virtual al que todos están migrando.

Desde el año 2000, cada 26 de abril, se trata de concienciar a la población acerca del Día Mundial de la Propiedad Intelectual, una fecha (coincidente con la fecha que entró en vigor el Convenio de la OMPI) que busca promover la importancia del respeto por los derechos que tienen aquellos que generan, a través de sus creaciones, la innovación y la creatividad.

La Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI), insta a los estados miembros a hacer eco de la fecha entre sus habitantes. Las empresas que distribuyen contenidos, así como todos los usuarios del ciberespacio debemos considerar seriamente el uso que damos a los contenidos que tienen en vigencia los derechos de propiedad intelectual o de autor, siendo esta una manera de valorar a aquellos que ponen en valor el poder creativo que tienen.

Con los cambios que experimentamos, no es nada alejado a la realidad, intuir que las empresas de tecnología, así como los gobiernos han de llegar a un consenso mundial sobre el uso y la seguridad de los usuarios y creadores de todo aquello que permanezca en la red.

 Imagen: Pixabay

Innovación y creatividad, sin ellas no avanzamos

«La creatividad implica huir de lo obvio, lo seguro y lo previsible para producir algo novedoso.» — Joy Paul Guilford.

La innovación y la creatividad transitan por el mismo sendero. Observando los avances de la tecnología y el transcurrir acelerado de la Era del Conocimiento, donde la creatividad es una brújula a la que se recurre con mucha frecuencia, me atrevería a decir que van de la mano.  De hecho, ya hay autores y estudiosos que propugnan por darle el título de «Era de la Creatividad» a este período de tiempo en que vivimos.

Imposible pensar en alguna aplicación innovadora que no tenga tras de sí una dosis alta de creatividad por parte de sus creadores. Es muy poco probable que nos encontremos con innovación pura sin que antes un cerebro creativo haya pensado en hacer las cosas de una manera distinta o simplemente dar respuestas a sus preguntas, decidiéndose “a crear”.

No todo lo creativo es innovador, pero todo lo innovador pasa por un proceso creativo. Clic para tuitear

Nuestra naturaleza humana nos dota de una fuente inagotable de creatividad que se incrementa en la medida que nos exponemos a la innovación, a la observación, al aprendizaje y nos decidimos a hacer uso de ella.

Se dice que la riqueza ya no solo la componen los recursos físicos con los que cuenta el individuo, en la actualidad consiste en controlar el conocimiento, reflexionar, investigar y crear nuevos conocimientos, lo que da lugar a la innovación.

La creatividad requiere tener el valor de desprenderse de las certezas”


― Erich Fromm

La competencia creatividad aparece en los anuncios y búsquedas de reclutamiento. Se ha transformado en una característica altamente valorada y se está trabajando, sentando bases para propiciarla entre los más pequeños. En las aulas de clases de países que tienen un alto conocimiento del comportamiento humano, luego de años de investigación y estudio se ha concluido que la creatividad puede potenciarse y fomentarse con ambientes que la propicien.

La Fundación Telefónica tiene un programa que se dedica a generar espacios de esta naturaleza llamado “Escuelas Creativas”. Un esfuerzo que ejemplifica la forma en que las empresas están promoviendo y aportando desde su zona de influencia para que se genere mayor creatividad y se transforme nuestra realidad.  En el vídeo hacen varias preguntas que compartimos ¿Se puede aprender del error? Sabemos que antes de crear algo realmente exitoso, hay que equivocarse y mucho. ¿Qué es más importante, el proceso o el resultado? ¿Será posible transformar nuestra realidad partiendo de la creatividad?

Escuelas Creativas-Telefónica

Las empresas y organizaciones buscan personas que sean capaces de ver el presente, entender la realidad y ver el futuro, a pesar de la incertidumbre que no tener certeza conlleva.  El mayor problema que enfrentan es que no todos saben qué buscar y cómo detectar esos perfiles. Y qué decir de que quiénes están buscando, los gestores de talento, en busca de perfiles creativos siguen utilizando metodología tradicional y pruebas que no se han actualizado, o desconocen temas y áreas donde se desempeñaran los candidatos seleccionados.  Es importantísimo que las personas que trabajan en búsqueda sepan que involucran la innovación, disrupción, curación de contenidos, pensamiento y conducta knowmad, UX writing, por mencionar tan solo algunas terminologías.

Lo interesante de esta “Era de la Creatividad” donde nuevos actores aparecen en la escena del conocimiento, es precisamente, que se posibilita el saber, siempre y cuando sepamos dónde y qué buscar. Todos con un poco de esfuerzo y trabajo enfocado en el aprendizaje podemos crear conocimiento y utilizarlo a nuestro favor. 

¡Por más reclutadores mostrando interés por saber más acerca de tecnología, innovación y creatividad!

Hablar de innovación sin hablar de creatividad es como hablar de luna sin sol, ambos se necesitan, dan balance y cumplen con su rol, sin uno la otra no estaría. De igual manera, hablar de creatividad y no mencionar a quien dedicó su vida al estudio y a partir de quién se comenzó a trabajar el estudio de la creatividad como parte de la capacidad intelectual de los humanos, el psicólogo Joy Paul Guilford (quien formuló la teoría del pensamiento convergente y divergente a mediados del pasado siglo, distinguiendo dos tipos diferenciados de llevar a cabo el proceso intelectual), es imposible.

Sus estudios e investigaciones nos enseñaron que la estructura de la inteligencia de las personas es un ente tridimensional. La primera de las dimensiones está compuesta por las operaciones o procesos mentales que lleva a cabo una persona para analizar la información recibida. La segunda incluye los contenidos semánticos, visuales, conductuales y simbólicos que amplían el mensaje. Y la tercera son los productos o respuestas generadas por el sujeto a partir de la información obtenida.

Al pensamiento divergente se le asocia con la creatividad en estado puro y en cualquier ámbito profesional, desde el sector artístico hasta las investigaciones científicas, e independientemente del cociente intelectual de la persona ha de tomarse muy en cuenta.

“La invención tiene sus propias reglas; a menudo, cuando alguien intenta descubrir algo, no es la lógica lo que lleva a la solución, sino un sinuoso proceso subconsciente” ―Kary B. Mullis Clic para tuitear

Cuando utilizamos el pensamiento lateral nuestro cerebro actúa en varios planos e incorpora diferentes perspectivas sobre un tema o cuestión, lo que nos permite obtener diferentes soluciones. La duración del pensamiento divergente es indeterminada, buscamos todas las opciones, por irracionales que parezcan, guiados por nuestra flexibilidad mental e inventiva, inclusive muchas veces lo hacemos sin tener muy claro lo que estamos buscando.

Aunque pasó algo desapercibida la fecha, el pasado 21 de abril fue el Día de la Creatividad e Innovación. Unesco expone en su página web que: “En el siglo XXI, la creatividad y la innovación, tanto a nivel individual como de grupo, se han convertido en la verdadera riqueza de las naciones.”

La Creatividad es más que una competencia de moda, es nuestra principal herramienta para crear y fomentar la innovación.

¡Todos podemos desarrollar la creatividad y contribuir a la innovación en diversas medidas e intensidades, tal como alumbra la luz del sol a medida que va amaneciendo!

Imágenes: Pixabay

Acerca de la autora:
Msc. Irasema Rivas-González


Construir capital creativo, el gran reto de las empresas líderes en tecnología

«En la Era de la Creatividad se necesita desarrollar el potencial creativo de todos los trabajadores, desde el oficinista hasta el informático» ―Richard Florida

Contratar a una persona creativa dejó de ser un asunto de agencias de publicidad y marketing para pasar a formar parte de los requisitos que aparecen en la mayoría de las vacantes de puestos que se abren en todo el mundo.
Desde científicos de datos, líderes de proyectos, expertos en seguridad digital hasta perfiles profesionales que en otrora eran muy enfocados a lo técnico, hoy nos encontramos la competencia blanda ―creatividad― dentro del listado de características requeridas para los cargos que se ofertan.

Al pasar la primera década del siglo XXI, comenzó a imperar lo que se ha llamado la «Era de la Creatividad».
Una gerencia, una empresa más creativa está destacando, tanto así que investigadores del Nomura Research Institute le han dedicado mucho tiempo y esfuerzo a estudiarla y proponerla como modelo, cuya tarea es adaptarse a la creación (resultado de la creatividad), construyendo una red flexible de especialistas, que apoyen al método de la creatividad es decir gente capaz de formular hipótesis, disimilar, crear conceptos y cadena de empatía con la finalidad de obtener soluciones que ayuden al consumidor a cumplir sus deseos, que no son otros que los que la Pirámide de Maslow ubica en el tope, deseos de realización y/o autosatisfacción.

Las empresas están buscando colaboradores creativos, habría que preguntarse si todos podemos ser o no creativos, y si es posible fomentar la creatividad en un mundo corporativo, marcado hasta hace algunos años por normas rígidas que alejan al talento creativo.

¿Es posible construir capital creativo?

La respuesta a esta pregunta nos lleva a citar a Gary Hamel, escritor de 17 artículos para Harvard Business Review y es el autor con artículos reimpresos en la historia de la revista. Sus libros de referencia han sido traducidos a más de 25 idiomas. De quien la Revista Fortune ha dicho que es «el principal experto mundial en estrategia de negocios», y el Financial Times lo llama un «innovador de gestión sin igual». Hamel afirma que es posible construir, con esfuerzos ingentes, capital creativo, pero se requiere determinación y proyectar a largo plazo, es una decisión que debe venir de la alta dirección de la organización.

“Si bien la mayoría de las personas tienen instintos creativos, se necesita práctica para aprender a pensar como un gamechanger. No esperaría que alguien golpeara una pelota de golf a 200 yardas por la calle sin un poco de entrenamiento. Lo mismo ocurre con la innovación. La forma más rápida de aumentar el rendimiento de innovación de cualquier empresa es enseñar a todos a cambiar el pensamiento convencional, interceptar tendencias emergentes e inventar soluciones novedosas para las necesidades profundas de los clientes.”


― Gary Hamel

Construir capital, atraer y fomentar perfiles creativos es un tema que nos interesa a todos los que trabajamos en tecnología, pero más allá del interés profesional nos atañe a todos porque esta «Era del Conocimiento» está marcada por la creatividad como raíz de todo tipo de nuevas alternativas de solución a los múltiples problemas que encaramos como sociedad.

No hay ciencia, tecnología, ingeniería, matemáticas y arte sin creatividad. Clic para tuitear


No hay ciencia, tecnología, ingeniería, matemáticas y arte sin creatividad. Es imposible que estas disciplinas se mantengan en constante cambio sin cerebros altamente creativos, sin creadores que se atrevan a cuestionar los procesos y estadios usualmente aceptados. La política, la filosofía y la investigación se nutren de las capacidades naturales del ser humano, del uso de su cerebro y experiencia, pero sobre todo de la capacidad de crear que poseemos.
Nuestro cerebro nos permite interpretar lo que vemos, razonar, imaginar, intuir, emocionarnos, nos deja ser “inteligentes”, ingeniosos, innovadores, nos permite crear. La creatividad humana es una fuente que parece inagotable, nos permite expresarnos de maneras distintas ante las mismas situaciones, solucionar los mismos problemas de formas diferentes y por supuesto, probar nuestra capacidad e ingenio.
Es por ello, que surgen en el estudio y la investigación, para tratar de comprender a los humanos altamente creativos, indicios que apuntan a que todos los creadores tienen en común, una actitud motivada por querer aprender y descubrir, por encontrar las respuestas a preguntas en momentos de relajamiento, pero si algo hacen es mantener el enfoque en lo que buscan solucionar o comprender e insistir sin descanso en ello.

“Cuando me examino a mí mismo y mis métodos de pensamiento, llego a la conclusión de que el regalo de la imaginación ha significado más para mí que cualquier talento para poder absolver el conocimiento absoluto”. Todos los agrandes avances de la ciencia deben empezar desde el conocimiento intuitivo. Creo en la intuición y en la inspiración… en algunos momentos siento que estoy en lo cierto, aunque no conozca todavía la razón”.


―Albert Einstein

La clase creativa

Se le denomina así a una clase socio económica identificada como fuerza impulsora clave para el desarrollo económico de las ciudades postindustriales en los Estados Unidos. Richard Florida el economista y científico social estadounidense profesor y director del Instituto de Prosperidad Martin en la Escuela de Administración Rotman de la Universidad de Toronto, acuño el término.

Según Wikipedia,»la clase creativa es una clase de trabajadores cuyo trabajo es crear nuevas formas significativas (2002). Está compuesta por científicos e ingenieros, profesores universitarios, poetas y arquitectos, y también incluye «personas especializadas en diseño, educación, arte, música y entretenimiento, cuya función económica es crear nuevas ideas, nuevas tecnologías y / o contenido creativo» (Florida , 2002, p. 8). Los diseños de este grupo se consideran ampliamente transferibles y útiles.
Se incluyen en esta clase a aquellas profesiones o cargos que son intensivos en conocimiento; estos generalmente requieren un alto grado de educación formal (Florida, 2002).Su trabajo principal es pensar y crear nuevos enfoques a los problemas, demostrando que la creatividad es cada vez más valorada en la sociedad global de hoy.
Los trabajadores creativos están buscando climas culturales, sociales y tecnológicos en los que sientan que pueden «ser ellos mismos». «El principal supuesto que subyace a este enfoque es que los trabajadores creativos buscan oportunidades creativas en todos los aspectos de sus vidas y, por lo tanto, migran a ciudades que apoyan activamente sus estilos de vida preferidos» (Donegan et al., 2008, p. 181).
Los empleadores ven la creatividad como un canal para la autoexpresión y la satisfacción laboral en sus empleados. Cerca de 38,3 millones de estadounidenses y el 30 por ciento de la fuerza laboral estadounidense se identifican con la clase creativa. Este número ha aumentado en más del 10 por ciento en los últimos 20 años.
La clase creativa también es conocida por su salida de la vestimenta y el comportamiento tradicionales del lugar de trabajo. Los miembros de la clase creativa pueden establecer sus propios horarios y códigos de vestimenta en el lugar de trabajo, a menudo recurriendo a un atuendo más relajado e informal en lugar de trajes y corbatas. Los miembros de la clase creativa pueden trabajar por sí mismos y establecer sus propias horas, sin seguir el estándar de 9 a 5. La independencia también es muy apreciada entre la clase creativa y se espera en el lugar de trabajo (Florida, 2002).»

Los talentos creativos centran toda su atención en una visión de futuro y sus intuiciones. Suelen ser percibidos por los demás como personas imaginativas y creativas. De estas personas dice que tienen una enorme capacidad para visualizar el futuro y conocer cómo mantener en constante producción a las musas de la inspiración, pues son incansables perseguidores de sus sueños y ponen todo su esfuerzo en materializarlos. Se mueven como peces en el agua de una idea o actividad a otra.

“La creatividad es contagiosa, pásala.”


― Albert Einstein

Es posible invertir en el desarrollo de la creatividad y el pensamiento lateral de nosotros mismos, recordemos que la creatividad es una fuente inagotable que le pertenece a la especie humana.

Construir, sembrar capital humano creativo es un proceso largo, muy gratificante, porque la empresa que invierte en ello, sin duda cosecha soluciones, nuevas maneras de hacer las cosas, procesos reducidos en tiempo y con mejor utilización de los recursos, pero sobre todo, es sumamente atractiva para esa clase profesional tan preciada.

La tecnología requiere de la creatividad humana para seguir ofreciendo a la sociedad mejores maneras para disfrutar de la vida.

Imagen: Pixabay

Referencias Consultadas:
http://www.saber.ula.ve/bitstream/handle/123456789/30936/articulo3.pdf?sequence=1&isAllowed=y
http://www.garyhamel.com/
https://www.nri.com/en

Acerca de la autora:
Msc. Irasema Rivas-González